mayo 14, 2024

Incidencia de deshidratación hipernatrémica en recién nacidos de término, alimentados con lactancia materna exclusiva en un hospital pediátrico de León, Guanajuato, México

Dra. María Nelly Guerrero García,1 Dra. Aidé Inés Contreras Landeros,1 Acad. Rafael Hernández Magaña,1 Dra. Katy Lizeth Reyes Hernández,2,3 Acad. Ulises Reyes Gómez,3,4 Acad. Luis Jorge Matos Alviso,4 Dra. Sandra F. Aguilar García5

Resumen

Introducción. La alimentación exclusiva con leche materna es la ideal en todo recién nacido de término. Cuando esta no es supervisada adecuadamente, sobre todo en madres primigestas, existe la posibilidad que presenten hipernatremia por falta de ingesta suficiente. Material y métodos. Estudio descriptivo retrospectivo, transversal y longitudinal de pacientes menores de 30 días de vida ingresados a la unidad de Neonatología del Hospital de Especialidades Pediátrico León entre el 2016 y 2019 con diagnósticos de deshidratación hipernatrémica (>146 mmol/L). Se obtuvieron datos del expediente clínico incluyendo a recién nacidos sanos de termino (37 y 41 semanas de gestación) alimentados con lactancia materna exclusiva. Resultados. Se identificaron 45 recién nacidos (24 madres eran primigestas) que a su ingreso presentaban ictericia (31%), oliguria (26%), fiebre mayor a 38° centígrados (23%) y pérdida de peso >10% (16%). Se observó que los recién nacidos que presentaban una pérdida de peso mayor al 7% en los primeros 5 días de vida contaban con un sodio sérico superior a los 150 mmol/L. Conclusión. En este estudio se encontró una incidencia global promedio de hipernatremia de 3.6 por cada 1000 recién nacidos, siendo similar a lo reportado en estudios previos. Se requiere una supervisión y apego temprano para lograr que la lactancia materna sea exitosa y evitar de esta forma la posibilidad de hipernatremia. 

Palabras clave: incidencia de deshidratación, hipernatremia por concentración, neonatos de término, lactancia materna exclusiva, primigestas 

Abstract

Introduction. Exclusive feeding with breast milk is ideal for all term newborns. When this is not adequately supervised, especially in primiparous mothers, the possibility of hypernatremia due to lack of sufficient intake exists. Material and methods. Retrospective, cross-sectional and longitudinal descriptive study of patients under 30 days of life admitted to the Neonatology unit of the Hospital de Especialidades Pediatrico León between 2016 and 2019 with diagnoses of hypernatremic dehydration (>146 mmol/L). Data were obtained from the clinical record including healthy full-term newborns (37 and 41 weeks of gestation) fed with exclusive breastfeeding. Results. 45 newborns were identified (24 mothers were primiparous), on admission they presented jaundice (31%), oliguria (26%), fever greater than 38°C (23%) and weight loss >10% (16%). It was observed that newborns who presented a weight loss greater than 7% in the first 5 days of life had a serum sodium greater than 150 mmol/L. Conclusion. In this study an average global incidence of hypernatremia of 3.6 per 1000 newborns was found, being similar to that reported in previous studies. Early supervision and attachment are required to make breastfeeding successful and thus avoid the possibility of hypernatremia.

Keywords: dehydration incidence, concentration hypernatremia, full-term neonates, exclusive breastfeeding, primiparous women.

Introducción 

La deshidratación hipernatrémica neonatal (DHN) es un proceso potencialmente grave secundario a una ingesta baja e inadecuada de líquidos, pérdidas altas de los mismos o consumo excesivo de sodio. Su incidencia a nivel global varía entre 1.7 y 5/1000 en recién nacidos vivos.1,2

La DHN se define cuando las concentraciones de sodio sérico son ≥146 mmol/L acompañadas de algún dato clínico como pérdida de peso (>10%), disminución de la uresis o evacuaciones, ictericia, mucosas secas e irritabilidad, entre otros. Se presenta en proedio a los 8 días de vida, con un rango desde el día 2 al 14. 

Es por eso por lo que los neonatos que presentan dicha patología requieren de la intervención temprana de especialistas bajo una rehidratación adecuada con soluciones orales o intravenosas y alimentación enteral supervisada. 

El objetivo del estudio fue determinar la incidencia de ingresos por DHN en recién nacidos  de término alimentados con lactancia materna exclusiva y describir los factores de riesgo asociados para determinar medidas preventivas. 

Material y métodos

Estudio descriptivo retrospectivo, transversal y longitudinal de pacientes menores de 30 días de vida ingresados a la unidad de Neonatología del Hospital de Especialidades Pediátrico León entre el 2016 y el 2019 con diagnósticos de deshidratación hipernatrémica (>146 mmol/L). Se obtuvieron datos del expediente clínico incluyendo a recién nacidos sanos de término (37 y 41 semanas de gestación) alimentados con lactancia materna exclusiva. 

Se excluyeron pacientes con antecedentes de prematurez, alimentación con sucedáneos de leche humana, hiperbilirrubinemia secundaria a etiologías inmunológicas o hematológicas, alteraciones genéticas, infecciones o cualquier tipo de malformación. Nuestro centro es un hospital exclusivo de población pediátrica que se encuentra hacia el Bajío de México con un servicio de neonatología con cinco camas de cuidados intensivos y cuatro en cuidados intermedios. Es centro de referencia del estado de Guanajuato y cuenta con área de urgencias con un promedio de ingresos entre 15 y 20 pacientes pediátricos diarios. Se tomaron como criterios de inclusión los valores de sodio de acuerdo con la tabla 1.

Se revisaron las historias clínicas de la madre, con edad, estado civil, escolaridad, vía de nacimiento, número de gestación, género, clasificación de edad gestacional, peso al nacimiento, datos clínicos de ingreso y evolución de los casos. 

Tabla 1. Definición de hipernatremia en recién nacidos. Tomado de Indian Journal of Critical Care Medicine, 2017.

Resultados

En el tiempo correspondiente a la investigación se identificaron 45 recién nacidos que reunieron los criterios de inclusión para su análisis, correspondiendo 25 al género masculino (55.5%) y 20 al género femenino (44.5%) (fig. 1).

Figura 1. Incidencia de recién nacidos de término con deshidratación hipernatrémica.

Entre el total de la muestra, el género masculino fue el de mayor ingreso (55.5%). La edad gestacional media de nuestros pacientes fue de 38.5 semanas de gestación con un peso medio al nacimiento de 3,046 gramos. El 75.5% tuvo el antecedente de nacimiento por parto y en su mayoría hijos de madres primigestas (53.3%) con una edad media de 24 años. Los datos demográficos y características tanto maternas como neonatales quedan descritas en la tabla 2

Tabla 2. Características demográficas (n = 45).

Dentro del cuadro clínico a su ingreso, los datos con mayor relevancia fueron ictericia (31%), oliguria (26%), fiebre mayor a 38° centígrados (23%) y pérdida de peso >10% (16%). Se observó que los recién nacidos que presentaban una pérdida de peso mayor al 7% en los primeros 5 días de vida contaban con un sodio sérico superior a los 150 mmol/L, como se observa en la figura 2. Otras pruebas complementarias para el abordaje diagnostico mostraron datos de falla renal aguda (prerrenal) en 21 pacientes, hiperbilirrubinemia en 17 e hipoglucemia en 5 


Figura 2. Datos clínicos al ingreso.

 

En la figura 3 se documenta que la gran mayoría contaba con un sodio sérico superior a 150 mmol/L, con predominio en los primeros 8 días y con una pérdida de peso entre un 5 y un 15%.

Figura 3. Concentraciones de sodio sérico divididas en grados: leve moderado, severo y muy grave, y días de vida.

Cuando se compararon las concentraciones de sodio sérico y la pérdida de peso en porcentaje, no se encontró alguna diferencia estadística (figura 4).

Figura 4. Comparación entre concentraciones séricas y pérdida de peso, lo cual ocurrió más entre un 6.3 y un 12.5% de pérdida de peso, pero sin significancia estadística.

Discusión 

En este estudio se encontró una incidencia global promedio de hiponatremia de 3.6 por cada 1000 recién nacidos, siendo similar a lo reportado en estudios previos. Es importante resaltar que durante el 2018 se incrementó esa incidencia, probablemente debido a que es un hospital de alta concentración y manejo de neonatos a nivel estatal, como se observó en la figura 1. Comparada con una revisión reciente (2022) de la incidencia global de la deshidratación hipernatrémica en recién nacidos, elaborada por Aguilar García,9 en la que menciona una incidencia a nivel global de 150/10,000 recién nacidos vivos, lo que corresponde a 18.7 por cada 1250 recién nacidos vivos, resultó mayor en un 15.1 a la encontrada en este estudio, que fue de 3.6 por cada 1000. La diferencia mayor en la incidencia podría explicarse porque la incidencia global incluye a todos los recién nacidos vivos y el presente estudio fue selectivo.

Comparada con la revisión de deshidratación hipernatrémica asociada con lactancia materna de Aguilar García et al.,9 coincide en que los principales datos clínicos presentados en los pacientes a su ingreso a urgencias fueron ictericia (31%), oliguria (26%) y fiebre >38°C (23%).

Por otro lado, es de llamar la atención que otro dato clínico de importancia arrojado por este estudio fue la presencia de pérdida de peso corporal mayor al 10%, representado el 16% de los paciente estudiados, muy similar a lo reportado en estudios previos de Hakam10 y González.11

La incidencia global en nuestro estudio fue de 3.6 por cada 1000 recién nacidos en nuestra unidad de neonatología, siendo similar a la encontrada en estudios previos. La Academia Americana de Pediatría ha recomendado que los niños a término egresados antes de las 48 horas después del parto y que sean alimentados al seno materno de forma exclusiva sean valorados dentro de las 48 horas posterior a su egreso por personal de salud calificado, sobre todo en mujeres primigestas. El prevenir es la mejor cura para la enfermedad, ya que las complicaciones secundarias a esta patología pueden llegar a ser catastróficas, siendo necesario un seguimiento oportuno de todos los recién nacidos alimentados al seno materno exclusivo con el fin de detectar a tiempo cualquier factor de riesgo que permita tomar la medida correctiva de forma oportuna. 

Referencias

  1. Martín DL. Deshidratación hipernatrémica grave neonatal por fallo en la instauración de la lactancia materna: Estudio de incidencia y factores asociados. Rev Pediatr Aten Prim. 2018;20:229-35.
  2. Hernández AC. Curso clínico de la deshidratación hipernatrémica en recién nacidos. Arch Inv Mat Inf. 2014;6(2):52-60.
  3. Nilofer SM. Hypernatremia in the Neonate: Neonatal Hypernatremia and Hypernatremic Dehydratation in Neonates Receiving Exclusive Breastfeeding. Ind J Crit Care Med. 2017;(21):38-41.
  4. Oddie S. Hypernatremic dehydration and breastfeeding: a population study. Arch Dis Child. 2001;85:318-20. 
  5. Bischoff AR. Treatment of hypernatremia in breastfeeding neonates: A systematic review. Biomed Hub. 2017;2:1-10. 
  6. González G. Deshidratación hipernatrémica asociada a la alimentación con lactancia materna en el periodo neonatal. Acta Pediatr Esp. 2016;74(10):261-5.
  7. Banda JB. Deshidratación hipernatrémica y lactancia materna inadecuada. Rev. Médica de la Paz. 2012;18(2):46-51
  8. Juliao J. Deshidratación hipernatrémica e hiperbilirrubinemia indirecta en el recién nacido a término. Rev. Med Sanitas. 2009;12(4):34-42. 
  9. Aguilar-García F, Guerrero-García MN, Contreras-Landeros AI, Hernández-Magaña R, Reyes-Hernández KL, Reyes-Gómez U y cols.  Deshidratación hipernatrémica en recién nacidos sanos, asociada a lactancia materna exclusiva (DHALM). En prensa 2024
  10. Hakam Y, Moza S, Maha D. Clinical Presentation of Hypernatremic Dehydration in Exclusively Breast-fed Neonates. Indian J Pediatr. 2004;71(12):1059-62.

González-García LG et al. Deshidratación hipernatrémica asociada a la alimentación con lactancia materna en el periodo neonatal. Acta Pediatr Esp. 2016;74(10):261-5.

Deja un comentario